Prevalencia y abordaje de los trastornos de ansiedad, depresión y somatizaciones. Eficacia y coste-efectividad de las intervenciones psicológicas en Atención Primaria Antonio Cano Vindely Paloma Ruiz Rodríguez3habitual en Atención Primaria (Fernández et al., 2006). La gran mayoría, dos de cada tres pacientes con ansiedad o depresión son habitualmente diagnosticados y tratados en Atención Primaria (Codony et al., 2007; Kovess-Masfety, Alonso, Brugha, Angermeyer, Haro, et al., 2007). Pero, en ambos casos, el tratamiento se basa esencialmente en la prescripción de psicofármacos o medicamentos psicotrópicos (más del 60% de los casos tratados), sobre todo ansiolíticos o benzodiacepinas, cuyo consumo crece anualmente desde que tenemos registros, a pesar de que su uso está desaconsejado por la evidencia, debidoa falta de eficacia y probabilidad de desarrollar adicción, así como porque aumentan la probabilidad de sufrir accidentes de tráfico o experimentar caídas y rotura de cadera en personas mayores. Las guías de práctica clínica, como la prestigiosa guía NICE, señalan que, para la mayoría de los trastornos emocionales, la recomendación inicial de tratamiento es la terapia psicológica (NICE, 2011). Pero el número de psicólogos clínicos en nuestros Sistema Nacional de Salud alcanza tan sólo una media de 6 profesionales por 100.000 habitantes, la más baja de Europa (12 menos que la media, 18/100.000) en el estudio ESEMeD. Por ello, menos de un 1% de los pacientes con un trastorno de ansiedad activo en los últimos 12 meses ha recibido tratamiento psicológico, sin fármacos, en el último año; y, en el caso de los pacientes con depresión, esta proporción alcanza entorno a un 5%. A su vez, España es el segundo país de la OCDE en consumo de las desaconsejadas benzodiacepinas y en 2018 la tasa de consumo de psicofármacos (tranquilizantes, antidepresivos y somníferos) alcanzó las 169,7 dosis definidas diarias, por 1000 habitantes (Kovess-Masfety, Alonso, Brugha, Angermeyer, Haro, M.D., et al., 2007; OECD, 2021).Sin embargo, en nuestro país han comenzado a surgir iniciativas que intentan ofrecer las intervenciones que aconseja la evidencia. Así, el ensayo clínico aleatorizado, simple ciego de dos brazos, grupo experimental y control PsicAP (Psicología en Atención Primaria) ha comparado la eficacia de las técnicas psicológicas basadas en evidencia, las técnicas cognitivo-conductuales, en grupos transdiagnósticos, frente al tratamiento habitual. El estudio se hizo en 1.061 pacientes que presentaron algún trastorno emocional de depresión (PHQ-9), ansiedad (GAD-7), pánico (PHQ-PD) o somatizaciones (PHQ-15) de 22 centros de salud de 8 comunidades autónomas, con el fin de analizar su eficacia, coste-eficacia y coste-efectividad (Cano-Vindel et al., 2021). Los participantes del grupo experimental además del tratamiento habitual, recibieron 7 sesiones de entrenamiento psicológico,en grupos de unas 8 personas, a lo largo de unas 12-14 semanasy el grupo control recibió exclusivamente el tratamiento habitual de AP ofrecido por su médico/a de familia, durante el mismo