Mod III - UD 1 - Capítulo 1. Delimitación de la pregunta

Capítulo 1. Delimitación de la pregunta

Como hemos visto en la “Unidad Didáctica 1, del Módulo 2”, para realizar una búsqueda en una base de datos, es mejor tener una pregunta específica debido a que, para una pregunta general la búsqueda arrojaría mucha información y sobre aspectos muy diversos. Aún, teniendo una pregunta específica, y sobre todo en el caso de la evaluación de tecnologías sanitarias u otras RSL, es clave la delimitación de la pregunta ya que el rastreo sistemático de bibliografía es un proceso lento y costoso.

Para la delimitación de la pregunta, es de gran utilidad una búsqueda previa que explore la existencia de revisiones sistemáticas sobre estudios primarios cuyos diseños respondan a nuestro tipo de pregunta o, en su defecto, estudios primarios de calidad y diseño idóneo que aborden la pregunta de interés.

De este modo, para delimitar correctamente la pregunta, debemos tener en cuenta los hallazgos obtenidos en esta búsqueda previa y la valoración de los mismos por profesionales con experiencia en el tema de interés y en MBE.

  • Con relación a los hallazgos previos, considerar:

    • ¿Cuánta literatura hay?

    • ¿Hay revisiones sistemáticas sobre el tema?

    • ¿Qué referencias citan las GPC al hacer sus recomendaciones sobre la pregunta de interés?

    • ¿De que calidad es la bibliografía que hay?

    • ¿Con la información obtenida se responde a la pregunta con estudios de suficiente calidad y diseño idóneo? De ser así, tal vez no corresponda hacer una RSL para esta pregunta, y lo que haga falta sea reformular o especificar más la pregunta inicial.

    • ¿Cuáles son las palabras claves que se utilizan para este tema?

    • ¿Qué bases de datos son las que probablemente nos den el mayor número de referencias relevantes?

    • ¿De qué recursos disponemos para hacer frente a esta búsqueda?

  • Con relación al contraste con expertos, el objetivo de esta consulta es integrar los hallazgos de la búsqueda previa con la visión de clínicos y otros profesionales de la asistencia, así como la de investigadores y expertos en MBE. Esta es una buena oportunidad para que, con la ayuda de los distintos expertos, se rentabilice la información y el conocimiento que se genera mediante la experiencia y la valoración del proceso de la MBE.